Una obra indie-urbana que hibrida el dolor de la nueva generación con la elocuencia del swag cordobés |
Juan Lopez se abre paso como una nueva promesa en la escena argentina con su segundo disco, CULIADO, a poco menos de un año y medio de su primer álbum, NO MÁS PROMESAS. Su primer adelanto, “como una ruleta”, fue lanzado en septiembre. CULIADO recopila 13 cortes que entretienen de principio a fin, como fiel reflejo de su personalidad ácida y ecléctica. El álbum fue producido en su totalidad por Juan Lopez con producciones adicionales de Bernardo Ferrón. A un concepto fuerte por sí mismo, se le suman colaboraciones de gran calibre: “ME SIENTO SOLO” ft. Dillom; PAHPAHPAH, junto a la artista chilena Akriila; y “PRIMO” con Ill Quentin y Doly Flackko. El disco se encuentra dentro del género auto-denominado “Indie Urbano”, ya que combina y experimenta con recursos del indie, rock y hip hop, logrando así un sonido diferente. Además, incluye elementos característicos como scratchs de vinilos, samples y momentos hablados. Con letras crudas y sinceras, usa su vida para crear un relato que conecta con sus oyentes. Un amor en declive funciona como el hilo conductor que une puntos como la juventud, la falta de dinero, la familia, el graffiti, vivir en otra ciudad, el éxito y más hitos de su vida personal. Al ser un disco casi autobiográfico, la portada-retrato con una herida sobre el facetatt hace un guiño sobre su contenido. La herida es un elemento principal en el álbum, ya que representa cada canción. En aquellas que tocan temáticas más banales y “flexeos”, la herida está cerrada, y en las que se abordan temas más sensibles y personales, está abierta. “El tatuaje en la cara es el desapego y al hacerle una herida encima quiero reflejar cómo ese estilo de vida me lastimó y cómo lastimé también a otros por ser así”, se sincera Juan. |