Con motivo de la presentación de sus conciertos en el Reino Unido esta semana, Kim Gordon lanza un nuevo single, «ECRP», con un video de acompañamiento en el que, una vez más, aparece, esta vez como directora, su hija, Coco Gordon Moore. En él, los cortes rápidos de una variedad de escenas callejeras de Nueva York aumentan la desorientación sonora de la canción producida por Justin Raisen, mientras Gordon habla de «rumores de libertad de expresión» y «cenizas en la mesita de noche.»
Gordon, que acaba de cerrar una serie de actuaciones en Norteamérica, incluido un concierto repleto en el Central Park SummerStage de Nueva York, comenzará su gira europea esta noche (25 de junio) en el KOKO de Londres, antes de actuar en el O2 Institute2 de Birmingham el 26 de junio y en el escenario Woodsies de Glastonbury el 30 de junio.
The Current habló sobre el reciente espectáculo en directo de Kim en Minneapolis y dijo que «Gordon y su banda decoraron 90 minutos con innovación musical e inspiración para que las mujeres exhiban sin complejos su sexualidad y su poder, a cualquier edad». Racket MN escribió: «Tenía curiosidad por saber cómo tradujo este proyecto de arte pop en una experiencia en directo. Y lo descubrí: con una banda de rock bastante Buena.»
A principios de este año, Gordon publicó su segundo álbum en solitario, The Collective, que fue aclamado por la crítica, y que Vulture y Pitchfork calificaron como uno de los mejores álbumes del año. ¡Gordon también hizo su explosivo debut como solista en la televisión nocturna, interpretando «BYE BYE» en Jimmy Kimmel Live! Míralo AQUÍ.
Grabado en Los Ángeles, ciudad natal de Gordon, The Collective le sigue a su debut de larga duración de 2019, No Home Record y continúa su colaboración con Raisen (Lil Yachty, John Cale, Yeah Yeah Yeahs, Charli XCX, Yves Tumor), con producción adicional de Anthony Paul Lopez. El álbum avanza en la construcción conjunta de su mundo, con el dub y el trap de Raisin como contrapunto a los collages de palabras intuitivas y los mantras gancheros de Gordon, que evocan la comunicación, la sublimación comercial y la sobrecarga sensorial.
